Home: Freunde Waldorf

Armenia: seis meses de escuelas cerradas

News ,  Corona ,  Aktuelles ,  Waldorf weltweit

También en Armenia están sufriendo las consecuencias de las cuarentenas y cierres escolares desde mediados de marzo, sobre todo aquellas escuelas de pedagogías alternativas, que tampoco reciben subvención estatal. Recién a mediados de septiembre los niños regresaron al colegio con estrictas medidas sanitarias: se mide la temperatura de cada niño por la mañana, hay obligatoriedad de uso de tapabocas en la sala de clase y en lugar de dos sólo puede haber un niño por mesa. Para poder dar clases en grupos separados, el horario escolar se extendió a los sábados y las clases Online continúan para los cursos superiores. El largo período de cierre escolar, las grandes exigencias para realizar clases presenciales y el confinamiento, generan graves problemas para la escuela Waldorf de Eriwan. “La mayoría de los padres y madres de la escuela trabajan en el sector turístico, en cafés, restaurantes y hoteles”, nos explica Ara Atayan de la escuela Waldorf, que fue fundada a comienzos de los años 90´. “Muchos han perdido su empleo. Algunos pagan sólo parte de la cuota escolar, algunos ya no pueden pagar nada.” Para otoño Atayan calculó una baja del 50% de ingresos mensuales. Una pérdida de al menos 108.000 Euro en total, que debe ser reequilibrado para que la escuela pueda seguir funcionando.

Junto a la Corona-crisis el país se encuentra en un nuevo recrudecimiento del conflicto de un siglo entre Armenia y Azerbaiyán por Alto Karabaj. En julio del 2020 recomenzó el conflicto armado con luchas entre las fuerzas de Armenia y Azerbaiyán en la frontera entre ambos estados. Este conflicto también se tomó como víctima a un ex alumno de la escuela Waldorf de Eriwan. Le contaremos en la página web acerca de su vida, demasiado corta.

Alen Vardanyan: Una vida corta, sacrificada en la guerra

Alen Vardanyan (2001-2020) fue uno de los alumnos más inteligentes, amistosos y artísticos de la escuela Waldorf Aregnazan en Eriwan. Tenía una sensibilidad increíble por la poesía, las artes y la historia humana. Todo le interesaba. En 7mo escuchaba las clases de Ara Atayans sobre poesía rusa. Todos recibían montones de poesías para leer de Pushkin, Lermontov, Visocky y otros poetas rusos. Los alumnos debían aprenderse las poesías de memoria; cada  alumno primero elegía una poesía de  su agrado y debía aprendérsela. Pero al final todos debían saberse todas.

Ara Atayan hizo un gran papel con los nombres de los alumnos en una línea vertical y los comienzos de las poesías en horizontal. Cuando alguien se sabía un poema de memoria, se colocaba una estrellita. Cuando se la sabía muy bien era una estrellita brillante, Cuando Alen Vardanyan hablaba, el sistema debía ser modificado para generar una nueva categoría: absolutamente hermoso. El modo en el que recitaba la poesía era nuevo y muy especial. No era una copia del profesor, no era un recitado tradicional era un relato creado completamente desde su personalidad. Y en ello era él bello como un caballero con un carácter totalmente pacífico. Ara Atayan decía: como Gavan desde la mesa redonda.

Vivía con su mamá y su hermana de 16 años en Eriwan y terminó la escuela Waldorf Aregnazan en el 2019. Como todos los jóvenes de 18 años, tuvo que ir al servicio militar.  Y en la primera semana de octubre, la primera semana del conflicto falleció en la montaña Karabach. Esta guerra sin sentido entre Azerbaiyán y Armenia por una pequeña zona montañosa, un conflicto que lleva más de un siglo y termina en guerra una y otra vez. Como todos los conflictos bélicos, se lleva sin motivo, vidas de jóvenes, que aún no han vivido lo suficiente y tenían un futuro prometedor por delante. Alen Vardanyan es el rostro de esa promesa rota.

Nana Goebel

Patrocinios & donaciones
Patrocinios & donaciones